Destapando Las Hojas De La Higuera
Desde el principio el ser humano a encontrado justificación para la realización de algún hecho. Pensando que de esta manera logramos cubrir la palabra pecado, adhiriéndole con una obra justificada por nuestro juicio humano. Así como Adán y Eva, que quisieron cubrir su desobediencia con unas hojas de higuera, muchos de nosotros estamos siguiendo el mismo patrón. Y a igual manera, quizás también, hemos tejido nuestras hojas de higuera, y hecho de ellas una vestidura permanente. Genesis 3:7-11
En los tiempos que estamos viviendo, y los movimientos que se han levantado, la maldad actualmente, ha incrementado de gran manera. Creo que más que nunca, podemos ver la necesidad de hablar de este tema, y levantar a la Iglesia de la conformidad de sus bancas. Mateo 24:12
El pecado se filtró en el Huerto del Edén, por la influencia de Satanás. La astucia de su obra, es la misma que todavía actualmente está operando hasta el día de hoy, o quizás de una peor manera. La degeneración de la moralidad humana, en base al pecado, proviene por la influencia. Y en estos días mayormente, estamos observando cómo estas influencias de corrupción están operando. Genesis 3:1, 1 Juan 4:3, Apocalipsis 12:9
La sociedad, se ha encargado de invadirnos por medio de aires tecnológicos, musicales, cine, gobierno y hasta religiones, están abarcando un gran terreno en nuestra tierra. Estas influencias llamativas se han encargado de envolver, atrapar y llevar cautivos la atención de muchos. Causando una confusión caótica, que provoca una alerta de urgencia a la iglesia. Por herencia, nuestras generaciones han recibido un fundamento caído, y también por el pecado original hemos heredado la muerte. Todo por la causa de la rebelión de uno y la desobediencia de otro. Efesios 2:2-3
La sociedad les ha dado por nombre a estas influencias, movimientos para libertad de expresión, libertad de adoración, libertad para amar, o simplemente libertad. Un nombre calificativo que aprueba el derecho a todo ser humano para una elección consciente. Mas sin embargo un derecho de libertad otorgado a todo ser humano, no por mérito propio; sino por el sacrificio de Uno que fue obediente. El ser humano no ha realmente comprendido lo que la palabra libertad significa. Hemos utilizado esta palabra de una manera equivocada, y llevado la libertad, a la cumbre del libertinaje. Romanos 12:2, Colosenses 2:8
Cuando al ser humano se le fue otorgado por Dios, la libertad para escoger. Esto no se refería, a que la humanidad cayera de una posición de libre, a una de esclavo por base a la consecuencia del pecado. Te has en algún momento preguntado, ¿Qué es el libre albedrío? ¿Y que es el razonamiento? Bueno, el libre albedrío es la capacidad del ser humano para escoger conscientemente lo que va a hacer, y no hacer. Tenemos el intelecto para realizar con libertad la elección que sobre lleva a un efecto inmediato, o en algunas decisiones con un resultado generacional. Romanos 5:20-21
La inteligencia del ser humano ha llevado a este mundo a obtener grandes logros en la ciencia, arquitectura, ingeniería, descubrimientos espaciales, genealógicos, etc. y esto es solo para mencionar algunas ramas. Pero en la materia, en lo que corresponde a la moralidad, ha llegado a un deterioro mundial. El pecado es la cobertura de toda la humanidad. Y esto es el resultado de la desobediencia, por una decisión consciente que obtuvo un efecto generacional. Ahora el hombre se ha separado de Dios, y ha quedado cubierto con hojas de higuera.
Pero nosotros como Iglesia tenemos la solución, para ir destapando las hojas de la higuera a todo aquel que está cubierto en pecado. Presentarles la verdad que proviene únicamente por medio de nuestro Señor Jesucristo, y su sacrificio perfecto que ahora nos ofrece una cobertura permanente. Para que volvamos a retomar la posición original de la cual nunca debimos ser quitados, y ser verdaderamente libres. Las hojas de la esclavitud ya no más serán nuestra cobertura, ni tendremos que vivir escondidos por el miedo a ser descubiertos, somos libres! Lucas 19:10, Juan 3:16
