Espiritu de Esclavitud
En Noviembre 21, 2018, escribí “Testimonio a una Revelación” en base de una experiencia que obtuve por medio de una situación que estaba pasando. Y en el día de hoy quisiera darle seguimiento al primer tema del cual quería exponer. Cuando estaba leyendo en esta mañana Romanos 8:1-39, no podía contener mi llanto de agradecimiento. El poder realizar la bendición de haber tomado la decisión más importante de mi vida, y romper las cadenas que me ataban a mi hombre anterior.
¿Como seres humanos, a cuántas situaciones o’ condiciones nos encontramos atados en este tiempo? Y aun así nosotros caminamos sin realizar la esclavitud en la cual vivimos. Algunos de nosotros estamos atados a nuestro tiempo, temores, enfermedades, trabajo, iglesia, cosas materiales, experiencias personales, cultura, costumbres, relaciones, familia, o’ aun peor a ti mismo. Somos cegados por ignorancia, pensamientos, entendimiento, emociones, sentimientos, actitudes e intenciones que nos impiden crecer. Este es el tema de hoy “Espíritu de Esclavitud”.
La serpiente con su astucia se colocó como raíz en nuestro fundamento, deslizando a llevar cautivo la voluntad para poder reconocer nuestra autoridad. Los ojos del hombre fueron cegados y nuestro entendimiento muerto a la verdad. Facilitando al hombre a seguir creyendo en un espíritu de error y vivir en una mentira. La mentira que lo secuestra y sostiene en cautiverio, sin ningún derecho legal sobre su vida.
El constante gemir y clamor interno que te repite como si fuera un disco rayado tocando la misma melodía con tema “Nunca vas a ser libre”. Como creyentes en un proceso de transformación quiero recordarte de tu decisión y la autoridad que se nos fue otorgada para afirmar nuestro cada paso. El miedo y la inseguridad que un día fueron nuestro escudo y fuente de vida, nos condenó a vivir sin ningún propósito. Yo sé que es un trabajo difícil de realizar porque por mucho tiempo fue nuestro compañero de viaje, y como sombra cubrió nuestro camino cada amanecer. Esta es la obra del enemigo para continuar bloqueando el destino y plan perfecto que Dios ha colocado en la vida del hombre. Tú tienes la solución en tus manos, no te dejes manipular por la inseguridad, reconoce tu valor, eres la obra perfecta.
Y ahora como hijos y coherederos juntamente con Cristo todas esas cosas quedaron atrás como parte del pasado. El temor a Jehová es el poder para enfrentar toda situación aún a base del miedo, aceptando nuestras incertidumbres y debilidades, pero con un corazón humilde. Y con la disponibilidad a despojar las ataduras del viejo hombre y renovándonos a cada latir. El Espíritu da testimonio por medio de nuestras vidas, y somos liberados de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa.
La medida del tiempo es solo un instrumento perfecto en las manos de Dios. Y como alfarero restaurando cada segundo la vida del hombre, y ahora nuestro pasado es solo un espejismo del porvenir, y lo que en un tiempo fue mi debilidad hoy es el “Testimonio a una Revelación”.
Todo este tiempo que hemos vivido bajo esclavitud condenado y atado a nuestro pasado, ahora con gran honor y privilegio somos siervos de la justicia. Y como dice Pablo: “Hablo como humano, por vuestra humana debilidad; que, así como para iniquidad presentasteis vuestros miembros para servir a la inmundicia y a la iniquidad, así ahora para santificación presentad vuestros miembros para servir a la justicia”. Romanos 6:19
Para terminar este tema, quisiera concluir con esta otra palabra del Apóstol Pablo, para recordatorio y que siempre estén presentes a cada segundo de tu caminar: “Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro. ¡Y hoy es tu día de liberación! ¡Eres libre en el nombre de Jesús el Hijo del Dios Viviente! Romanos 8:37-39