Valle de Sombra
¿Nunca te has sentido como si estuvieras solo? Como si te encontrarás atrapado en un lugar en donde no hay consolación; y mucho menos esperanza. Donde el silencio es tu mejor amigo y la desesperación tu cubierta. ¡Yo se que si! En alguna ocasión y por alguna situación hemos llegado a ese valle de oscuridad. Salmos 23:4
Nuestro peor enemigo que a venido por generaciones; no es exactamente lo que nosotros conocemos. Les voy a presentar a tu enemigo: leb, לֵב; palabra hebrea que significa hombre interno; mente; voluntad; corazón. La invasión de este hombre es lo que ha llevado la tierra a su corrupción. Tito 1:15
La astucia de este enemigo se nos fue presentado en el libro de Génesis; donde por primera vez la expansión de este movimiento interno inicia su batalla. Un pensamiento es originado fuera de nuestros cuerpos; después nuestro cerebro lo procesa y trata de adaptarlo a nuestra capacidad de entendimiento y su función. El hombre fue capacitado en su rebelión para reconocer el bien y el mal. Establece su propio gobierno y lo que el ahora nombra justicia. Allí fue el establecimiento de este “Valle de Sombra”. Genesis 3:1-7
Mas ahora; este gobierno de muerte es lo que nos lleva a caminar por esos caminos de oscuridad e’ incapacitando nuestras mentes. La distribución de estas sondas electromagnéticas ahora activan estos pensamientos que escalen en forma inmediata y opaquen nuestro camino. Confusión, Inseguridad y Caos son los adjetivos que definen mis pensamientos; trasladando mi FE en cautiverio. La invasion de estas sombras son la estructura de mi formación; y su repetición en mi cerebro es un disco rayado que no deja de tocar. Permitiendo que mi cerebro sea invadido por basura y hábitos mentales de repetición los cuales han sido grabado por participación propia. Efesios 4:17-19
Este es mi “Valle de Sombra”: en Mayo 08, 2016 pierdo a mi padre; y luego después en Noviembre 14, 2017 a mi madre. En ese momento soy arrebatada y trasladada al desierto. Ahora estoy sola, inconsolable, y la esperanza lejana a mi. El silencio ahora era mi lugar de seguridad y mi cubierta fue elevada. ¡¡¡¡¡¡Porque!!!!!! Clamaba en desesperación…..Lo que para mi era por producto de mi caos; ahora es una realidad. Mis padres ya no están conmigo……¿que va ser de mi? ¿Me he quedado sola? ¿Que vas ser de mi vida? ¿Y mi vida espiritual? ¿Donde quedo la FE? La esperanza se desvaneció por un fuerte viento; dejandome vacia y hueca. Salmos 86:1-7
Esta condición de desorden por una desobediencia antigua; me coloca en una examinación propia y soy llevada a juicio. Tomo mi lugar en “La Silla de Juicio” y empieza la interrogación. La colectividad de ambos lados es expuesta. La fuente natural que magnifica una imagen caída; es “El Espejismo” de lo que ahora soy. Mi corazón no encuentra consolación y quebrantado en su tribulación; no puede ver más allá de lo que está frente a sus ojos. La resonancia de mi llanto invade mi cuerpo imponiendo en duda mi FE. El velo fue rasgado y mi templo destruido. Efesios 4: 22-24, Romanos 8:5-6, 2 Corintios 3:18
Pero sin embargo una voz interna empieza a vibrar dentro de mi diciendo lo siguiente; “Tu formastes mis entrañas; Tú me hiciste en el vientre de mi madre, Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; Estoy maravillado, Y mi alma lo sabe muy bien……..” Recordé las palabras que fueron determinadas para mi; en el momento de mi primer encuentro con EL. Mis pensamientos de inseguridad fueron borrados; una vez más pude sentir SU fidelidad como “Caricias de Amor” fortaleciendo mi confianza. Salmos 139:1-24, Jeremías 17:9-10, Salmos 7:9, Apocalipsis 2:23
La secuencia de volver a vivir un “Tiempo de Caos” nunca más iba a dejar “Huellas de Dolor” en en mi corazón. Lo que en un tiempo pudo haber sido mi final; ahora era mi principio. La renovación de mi mente para disfrutar cada “Soplo de Vida” en abundancia es ahora mi ideal de vida. El conocimiento de lo que fue ahora sería que como cicatriz de un legado de amor. Por último: “La FE” la herencia de mis padres y mi mayor tesoro. Gracias; Señor por darme una oportunidad más para poder vivir este momento de Victoria! Colosenses 3:10, Romanos 12:2-3, Tito 3:5